Hoy Jueves Santo iniciamos el Triduo Pascual en el que conmemoramos la muerte y resurrección de Jesús, junto a la Virgen de los Dolores, Rectora y Abadesa de toda la obra de Mama Antula.

“Vayan a pedírselo todo a la Abadesa de esta Casa” repetía Mama Antula cuando faltaba alimento o las personas que hacían los Ejercicios Espirituales compartían sus penas. Mama Antula nombró Abadesa de la Santa Casa de Ejercicios Espirituales a la Virgen de Dolores, una advocación que conmemora los 7 dolores que atravesaron el Corazón de la Virgen María desde el nacimiento de Jesús hasta su muerte de Cruz, el descendimiento y sepultura de su Hijo.
En estos días de la Semana Santa la Virgen está de pie junto a La Cruz -la acompañan San Juan y María Magdalena- sufriendo los dolores más grandes que conoce el alma humana: los de una madre a quien se le muere un hijo. El inconmensurable sufrimiento cesa el Domingo de Resurrección, por eso la Virgen de los Dolores es también la Virgen de la Esperanza.
Le rezamos a Mama Antula y a la Virgen Dolorosa un Padrenuestro y 7 Ave Marías, y decimos:
“Madre mía, haz que mi corazón acompañe tu dolor en la muerte de Jesús”.
Feliz Triduo Pascual