El Padre Juárez gestiona y cumple con el pedido de la beata Cañete de vivir y morir con las gracias de todo jesuita. Se lo comunica en una carta enviada a Funes, por lo que se infiere que Cañete es una de las beatas que quedó en Córdoba antes de que Mama Antula arribara a Buenos Aires.

Amada en Cristo, María Teresa de las Mercedes de María.
Supongo que ya recibisteis mi respuesta por mano de nuestro Don Ambrosio Funes, a la vuestra apreciable que me vino por ese mismo medio. En ella os decía que haría yo diligencia para conseguir vuestra súplica. En efecto, se ha conseguido, y os la remito, aunque está en latín, para vuestro consuelo. Se os concede en ese escrito que puedas participar como si fueras Jesuita, de todas las gracias, sacrificios, oraciones, ayunos, mortificaciones y de los méritos de todas las obras buenas que se hacen en toda la universal Compañía de Jesús; todo lo cual os lo comunica el Padre General de la misma Compañía, que está en la Rusia. Y por esta Santa Hermandad, podéis vivir, morir y ser enterrada con la sotana de la Compañía, como lo deseabas. Se os concede a vos todo y de la misma suerte que logró la Madre Beata María Antonia. Espero que este favor que os hace Dios, servirá para estimularos más a la virtud, para encomendar más a Dios nuestra Compañía y para no olvidaros de mí en vuestras oraciones.
El Señor os bendiga y a este vuestro servidor y hermano en Cristo.
Gaspar Juárez.
Ficha técnica.
- Fecha: 15 de enero de 1803
- Desde Roma
- Del Padre Juárez
- a Doña María Teresa Cañete
- Idioma: Español
Cf. Blanco CXXXVII: Gr 174-175 (en castellano). Roma, 15 de enero de 1803.